Volonté llega al corazón de los tangos que interpreta

Por René Vargas Vera, La Nación, 11 Octubre 2001 — La bellísima María Volonté vuelve otra vez al sugestivo Local de los Apóstoles. La cubre un vestido claro de fiesta que deja entrever sus encantos. Está allí no para repasar su ecléctico repertorio -que recorre el cancionero de buena parte del mundo- sino para bucear en los intersticios de la canción porteña.

… María Volonté sabe exactamente qué notas está cantando y qué dicen los versos. Por eso es capaz de desgranar con inédita unción las frases de “Fuimos”, de “Vete de mí” y del hoy transitado “Naranjo en flor”.

Asumiendo cada canción ciudadana con la libertad de fraseo y de intención de quien llega dispuesta a correr el velo para que todos descubramos la belleza escondida en nuestros mejores tangos, María nos regala todas sus sinuosidades, sus escondidas emociones, sus hallazgos melódicos, armónicos y poéticos.